lunes, 29 de noviembre de 2010

El AmOr

Cómo saber si estás enamorada... Y si él también lo está de ti

¿Enamorada o simplemente capricho? En el juego del amor a veces resulta muy difícil disociar ambos términos, lo que al final acaba pasando factura. Por eso, es importante aclarar en tu mente y en tu corazón qué sentimientos tienes hacia esa persona que te está volviendo el mundo del revés.
Enamorado, según el diccionario, es el que tiene amor, pero no todo el que siente amor tiene por qué estar enamorado. El enamoramiento es un estado físico y mental que a veces se confunde con la ilusión, el capricho o la obsesión. Y escoger un amor imaginario en lugar de uno real puede ser lo que marque la diferencia entre la felicidad o la infelicidad.
Entonces, ¿cómo no equivocarnos?, ¿cómo saber si se está o no verdaderamente enamorada y, a la vez, si él también lo está?

¿Estás enamorada?
El amor no es una ciencia exacta, pero sí que existen una serie de pautas que te pueden llevar a la conclusión de que estás enamorada de esa persona que conociste de forma casual.
Si todo era orden en tu vida hasta que llegó esa persona capaz de desbaratar en un segundo lo que te costó años construir, puede ser un buen signo de que alguien ha sido capaz de calar hondo en tu interior.

Ahora ha llegado el momento de plantearte las preguntas de rigor que te darán la solución a tu enamoramiento o encaprichamiento:
¿Te imaginas con él toda la vida? ¿Qué te gusta de él?... ¿su físico?, ¿su manera de ser?, ¿su coche?, ¿su forma de pensar?, ¿su ropa?, ¿su sentido del humor?, ¿su responsabilidad?, ¿su seriedad?, ¿su alegría?...
También puede ser que sólo quieras pasarlo bien, tener alguien con quien salir a comer, ir al cine, a bailar o a pasear, que simplemente lo necesites para que se mueran de envidia aquellos que no daban ni un duro por verte con alguien. Si es así, no te engañes, NO estás enamorada.
Tu corazón, más que tu razón, es el que te dará respuestas a estas cuestiones. Y es que, si bien la atracción puede durar de uno a tres meses, el amor lo suele hacer años.
Enamorada del amor
Hay personas que por su forma de ser o por su vida se hayan en un estado continuo de atontamiento potenciado por la presencia de alguna persona que muestra cierto interés. Son personas enamoradas del amor:
Mujeres sensibles a las palabras amorosas y a las frases románticas.
Mujeres que han permanecido durante mucho tiempo solas.
Mujeres cuyas amigas la han ido abandonando por sus novios.
Mujeres desesperadas por salir con alguien.
Mujeres cansadas de que en las reuniones sociales se les pregunte siempre por su soltería obligada.
Mujeres que acostumbran a soñar despiertas con un amor de película.
Mujeres que sienten pánico a no encontrar al hombre de su vida...
Todas ellas suelen mostrarse bastante predispuestas a decirle "sí" al primero que pasa.
Insatisfacción, tristeza, infelicidad... suelen ser los resultados finales de una decisión mal tomada. Y es que el verdadero amor no es un juego y de tu elección depende la felicidad futura.



Síntomas que delatan el amor
Hay unos síntomas físicos que delatan el enamoramiento:
Cuando lo extrañas a todas horas y cuentas los minutos que te faltan para verle.
Cuando no puedes sacarlo de tu mente en ningún momento y cada segundo está en tu pensamiento.
Cuando una mirada, una caricia, un abrazo, un beso, etc., te hacen bailar mariposas en el estómago.
Cuando te late el corazón a mil por hora cada vez que le ves o estás cerca de él.
Cuando su felicidad es la tuya.
Cuando no existe nadie más por la calle.
Cuando tus prioridades han cambiado y dejas a tus amigas o a tu familia por estar con él.
Cuando cada cosa que ves, escuchas o hueles, te recuerda a él.
Cuando cualquier excusa es buena para comprarle lo que le gusta.
Cuando te sientes la persona más feliz de la tierra y sonríes y lloras sin ninguna razón aparente.
Cuando el tiempo a su lado pasa volando y siempre quieres más, volviéndote adicta a su contacto.
¿Y él? ¿Está enamorado de ti?
Para saber si sus sentimientos son iguales que los tuyos, una de dos, o se lo preguntas directamente o se lo sonsacas con esas armas de mujer.
Preguntas como '¿qué te gusta más de mí?' o '¿por qué te gusta estar conmigo?', pueden darte una idea de si al menos está interesado o no en ti.
Además, si le encanta estar contigo y hablar contigo, no para de llamarte y busca cualquier excusa para estar contigo, pueden ser unas buenas demostraciones de que siente algo por ti.
Así como el amor enriquece a las personas, cuando es compulsivo se convierte en pesadilla. Una pesadilla fruto de la propia inseguridad y del deseo de control y de manipulación.
El amor no es obsesión
No hay que confundir amor con obsesión, tanto por parte tuya como por parte de él.
Si no para de perseguirte, se te aparece de forma inesperada en los lugares más raros, siente celos de cualquier bicho viviente que se acerque a ti, se pelea continuamente contigo sin ningún motivo, no siente control sobre sus emociones, no respeta tu espacio ni tu intimidad, no es capaz de salir sin ti, amenaza con hacerse daño o suicidarse si le dejas... ¡Ojo!, está obsesionado.
Aunque suene a culebrón, esta actitud es más habitual de lo que imaginamos y suele configurar el prototipo de los futuros maltratadores. Así como el amor enriquece a las personas, cuando es compulsivo se convierte en pesadilla. Una pesadilla fruto de la propia inseguridad y del deseo de control y de manipulación. Auténticas bombas de relojería andantes.
En el libro No te obsesiones con el amor, de Susan Forward, la autora plantea varias preguntas que permiten saber si alguien está obsesionado contigo. Porque, si es así, lo mejor es alejarte de esa persona.



viernes, 26 de noviembre de 2010

* La dolescencia y el profesorado *

 *En la sala de clases a la que llegará en cinco minutos el profesor, están pasando muchas cosas.

Las niñas del primer banco han discutido con sus padres y esta vez sienten que tienen razón. Los de la tercera fila se han iniciado en el arte de observar de "otra manera" a las chicas. Los de atrás juntan teléfonos de amigos a quienes llamar para conversar toda la tarde.

El profesor entró con su libro de ciencia de séptimo básico y empieza la clase.

"No, no puede entrar y pasar materia", afirma Rosario, profesora de matemáticas. "Tiene que aprovechar la experiencia que están viviendo su alumnos para motivarles a aprender".

Es que en los adolescentes están viviendo cambios fundamentales en sus vidas y es parte de la magia de ser profesores, el que sus intereses sean apropiados para la clase. "Tienes que acercar los contenidos de tu curso al mundo de los alumnos, al mundo que realmente viven, a sus necesidades y sus aspiraciones. Por ejemplo, recuerdo que en un séptimo básico, los alumnos "aún" no tenían incorporado los conceptos de multiplicación y división. Les pregunté qué querían comprarse y en qué tiempo. Después les pedí que vieran cuánto tenían que ahorrar por mes, por semana o por día. Y funcionó, porque se sentían motivados, no eran sólo ejercicios de matemática que desarrollar, era su mundo o parte de él

lunes, 22 de noviembre de 2010

* La familia y el adolescente *

Hasta aquí nos hemos referido a la inserción del joven en su grupo familiar, pero lo hicimos teniendo en cuenta, predominantemente, lo sucedido en la dimensión intrapsíquica. Me parece conveniente entonces dedicar ahora algún espacio a lo que pasa en la familia durante la adolescencia de uno o más de sus miembros. Vicisitudes que deben ser estudiadas detenidamente, ante todo porque nacen de un importante cambio en las reglas de juego de la convivencia. Reglas que se habían mantenido bastante estables durante un considerable número de años. Los cambios muy radicales y rápidos constituyen siempre una crisis que necesariamente se manifiesta a través de una serie de acciones adaptativas, las que, a su vez, buscan recuperar el equilibrio perdido. Cuando tales acciones coinciden con un proceso de crecimiento rápido como es el caso de la adolescencia, la conflictiva llega a dimensiones casi ontológicas.
 
Por otra parte deben tenerse en cuenta otras condiciones del medio en el cual se produce este fenómeno. La familia está pasando por diversas situaciones de desequilibrio: los niños llegan a la pubertad más o menos en la misma época en la que los padres han comenzado a tomar conciencia de su salida de la etapa juvenil, y en ciertos casos, en el momento en que los abuelos están ingresando en la tercera edad. Tres crisis simultáneas en una familia son demasiadas. Pero limitémonos por el momento a la primera de ambas razones de inestabilidad interaccional: la salida de la juventud de los progenitores del adolescente. Esta auténtica crisis ha sido caracterizada por Marcelli y Braconnier (1986) "por la súbita percepción de la brevedad del tiempo y por la reevaluación de las ambiciones del individuo, que son la traducción de su ideal del yo" , en tanto se reorienta la valorización de este tiempo repentinamente acelerado, con el consiguiente privilegiar el pasado. "Es la edad del balance, la edad en la que el pensamiento y la reflexión son los medios de dominio prevalentes, reemplazando a la acción" . Precisamente semejante cambio de actitud existencial coincide en el tiempo, y se contradice en cuanto a su significado vital, con la del joven, que es de adhesión emocional al presente y al futuro. Comprenderemos mejor la dimensión de la crisis si visualizamos el punto de la curva vital en la que se encuentra cada uno de los protagonistas: dadas las expectativas de vida vigentes en nuestra época, un adolescente de quince años tiene por delante el 80% de la suya, y un adulto de cuarenta y cinco, ya ha consumido e1 60% de la propia.
 
Muchos de los padres que cursan esta etapa comienzan a experimentar temores originados en el mito de una supuesta reducción radical del rendimiento sexual. Una consecuencia inmediata es la descalificación de la propia capacidad de seducción -incluyendo en ello al cónyuge, que es arrastrado en la caída-, y otra, tan fantasiosa como la primera, es la sobrevaloración de las posibilidades sexuales del adolescente.
 
Tal sobredimensionamiento está vinculado, en muchos casos, con la proyección de una formación reactiva por medio de la cual el adulto pretendía defenderse de aquella autoimagen decaída, pero que no tarda en generar una nueva motivación al conflicto intergeneracional: la envidia, casi inevitable, cualquiera sea el grado de conciencia de la misma. Otro mecanismo de defensa posible es la identificación, manifestada por la aparición de transgresiones sexuales de los padres, relacionadas con la aparición de la búsqueda de una supuesta libertad, sospechosamente adolescente.
 
El descenso de la autoestima lleva también a los padres a buscar nuevos valores para el propio ideal del yo. En tal situación y ante la pérdida de sus propios progenitores, o ante el temor de que la misma se produzca, resucitan, idealizadas, las viejas exigencias de la generación anterior, que tratan de ser aplicadas en un contexto familiar y social que por cierto es completamente distinto, con la así inevitable consecuencia de fracaso.
De más está decir que éstas no son las condiciones ideales para enfrentar educativamente la ardua problemática de un hijo adolescente, quien a más de sus turbulencias, se convierte en un involuntario e inconsciente denunciante de inconsecuencias. Cada acto o cada gesto del joven suscita reacciones inconscientes en sus padres, las que, a su vez, devienen con facilidad en actitudes represoras y,o agresivas. Con cierto sentido del humor, pero sobre todo con una notable precognición de lo que sería el mundo del consumismo despiadadamente egoísta que hoy, púdicamente, denominamos postmoderno, Stone y Church (1959) describieron esta situación: "Cuando un padre se enfurece por la falta de contemplación de su hijo para con la sensibilidad y derechos de los demás, su emoción puede estar en proporción directa con sus propios deseos ocasionales de alejarse a una isla tropical solitaria, desprenderse de sus responsabilidades y vivir una vida de egoísmo anárquico". Si a la situación descripta en párrafos anteriores le adicionamos el estado de ánimo correspondiente a las pérdidas sufridas a lo largo de
sus vidas, y especialmente desde que su hijo ha dejado atrás la infancia, tendremos un mejor panorama de las dificultades parentales que llevaron a los especialistas a pensar en la adolescencia, no tanto como una crisis personal de la postpubertad, sino como una situación crítica de todo el grupo familiar.
Acabamos de aludir a las pérdidas sufridas por los padres, y con respecto a ellas hemos de decir, ante todo, que constituyen un fenómeno simétrico y coextensivo a las del adolescente, ya estudiadas en este ensayo. A los padres también se les muere el niño cuando todavía no se ha hecho presente el adulto capaz de reparar la pérdida. Para colmo todo ello sucede mientras la pareja parental ve desvanecerse la idealización a la que estaba acostumbrada, y comienza a insinuarse la autodescalificación de sus posibilidades, y a emerger crudamente el temor de envejecer.
 
Si en este momento se produce el fallecimiento de uno o más de los abuelos del joven, éste pierde un puerto de reparo tranquilizador pero los adultos alcanzan un nivel de sobresaturación en cuanto a la capacidad de elaborar duelos, así como una notoria perturbación de la identidad.
 
Digamos entonces, nuevamente, que no les falta razón a aquellos autores que según adelantamos hablan de crisis de la familia adolescente.
 
A fin de comprender mejor el lugar que ocupa la relación del adolescente con sus padres, es interesante compararla con la que mantiene con sus pares. Para ello confrontaremos los temas de conversación más frecuentes en uno y otro medio.
 
Cuando los adolescentes hablan con sus padres los temas son, según la encuesta del CEOP: 


CUADRO VIII
 
TEMAS DE CONVERSACION CON LOS PADRES
Temas de colegio 69,7%
Drogas/SIDA/Alcohol 62,1%
Problemas personales/íntimos 52,2%
Temas de trabajo 52,2%
Sexo 46,9%
Temas intrascendentes 37,5%
Política 35,8%
Otros 11,4%
Ninguno en especial 9,7%
Paralelamente, con sus amigos hablan de (cuadro ya incluido en este ensayo) :
 
CUADRO IX
 
TEMAS DE CONVERSACION CON AMIGOS
 
Sexo 66,1%
Drogas/SIDA/Alcohol 60,8%
Problemas personales/íntimos 60,1%
Temas de colegio 59,5%
Temas intranscendentes 43,2%
Política 30,9%
Temas del trabajo 30,1%
Otros 13,1%
Ninguno en especia1 13,1%
El 86,7% de estos mismos jóvenes creía que mantenía un buen diálogo con sus padres. El 64,0% reconocía que ante un problema serio recurría a su madre, el 56,2% a un amigo, y el 41,3% al padre.

La autonomía - El adolescente y su familia

El joven, a medida que crece, va ganando progresivas porciones de independencia con respecto a su familia, pero tal autonomía nunca llega a ser completa como lo harían presumir algunas de sus actitudes externas. Estas actitudes son las que habitualmente englobamos conceptualmente en el vocablo rebeldía. Pero será bueno aclarar que el adolescente es mucho más rebelde en apariencia que en la realidad de sus sentimientos más profundos. Ello se debe, ante todo, a una de las características definitorias de la etapa: el adolescente que reclama -a veces con violencia- su libertad, es el mismo que no puede eludir su dependencia real, a la que se ve irremediablemente sometido por una cultura progresivamente compleja y de exigencias crecientes.
 
Por su parte la familia contribuye a esta situación ambigua, Horrocks (1957) ha expresado adecuadamente que "la familia del adolescente es, al mismo tiempo, fuente de seguridad y de dificultad". La seguridad obtenida por el joven de su grupo familiar tiene el contrapeso del freno que necesariamente implica para el desarrollo independiente, por su propia estructura y por las vicisitudes emocionales que plantea.
El hecho, coextensivo con la señalada ambigüedad, es el de una cultura que por un lado idealiza la obediencia y el respeto a los mayores y a las instituciones por ellos creadas, pero a la vez se muestra hipercrítica con respecto a las resultados obtenidos, y valoriza la independencia. El resultado no puede dejar de ser muy confuso, y conduce con cierta frecuencia a situaciones desagradables.
 
A mediados del siglo XX, en los E.E.U.U. de Norteamérica, y especialmente en las ciudades de menor población, los rasgos familiares más señalados eran "la confianza, el afecto y el compañerismo" , pero también, y en proporciones próximas a las de éstos, "la discordia" (Horrocks, 1957). En esa misma época se suponía que los hogares sin conflictos graves coincidían con adolescentes que contaban con sus padres y que permanecían fieles a los mandatos de éstos, mientras que de los jóvenes de hogares con severas desavenencias, demasiada rigidez o excesiva permisividad, se esperaba que presentaran características diametralmente opuestas.
 
Hoy entendemos las cosas de otra manera: el lugar de inserción del adolescente en su grupo familiar es aquel espacio conflictivo en el que se da el interjuego entre lo sociocultural y lo intrapsíquico. Por otra parte la zona de conflicto adolescente-familia está condicionada por diversos factores, entre los cuales resulta importante destacar la necesidad del joven de rechazar las figuras parentales, por imperio de la inevitable caducidad de los viejos modelos de identificación, y como defensa ante la reactivación de la situación edípica. En su caída, las figuras parentales arrastran a otros miembros de su misma generación o de las más próximas: tíos, hermanos y primos mayores, docentes, ministros religiosos, etc. Tal vez la imagen menos afectada por este rechazo generalizado sea la de los abuelos, sobre todo si no conviven con el adolescente, y siempre que no tengan conductas intrusivas en la vida de aquel. Por otra parte, si el adolescente conservara intactas las imágenes idealizadas de los padres, tal como habían sido deificadas en la infancia, se vería imposibilitado de crecer. Por lo tanto los ídolos necesariamente deben ser derribados.
 
Desde la óptica parental semejante situación será necesariamente vivida como realmente agresiva. A la vez los padres se ven compelidos a renunciar a quince años de hábitos disciplinarios y a una idealización muy satisfactoria para su autoestima. Como veremos algo más adelante, estos progenitores muy posiblemente están en plena crisis de la edad media de la vida, durante la cual uno de los rasgos más sobresalientes es precisamente la desestabilización de la autoestima. Con estos datos no puede llamar la atención que la situación hogareña quede al borde de alcanzar condiciones explosivas.
 
Además, el conflicto generacional doméstico se complica con la fascinación que la juventud ejerce en nuestra época, sobre todo en quienes se sienten amenazados por un porvenir de envejecimiento considerado no demasiado lejano. La envidia es un fantasma más o menos inconsciente, agazapado en cada episodio de enfrentamiento entre padres e hijos. Blos (1981) se ha referido a este aspecto del desarrollo con un brillo no carente de crueldad. Según este autor "uno puede observar el efecto recíproco del joven alienado y el adulto desasosegado; el actor ostentoso y el espectador ambivalente".
 
No sé en qué medida puede aceptarse como una ley la idea de Winnicott en el sentido de que crecer es, por naturaleza, un acto agresivo, pero me parece indudable que durante la adolescencia, y más allá de la intencionalidad de los jóvenes, las cosas resultan realmente así. De todas maneras me parece que es imprescindible evitar el planteo de esta problemática con mentalidad apocalíptica. Lo más adecuado desde el punto de vista de la Psiquiatría Preventiva sería hablar de reorganización del vínculo y no de ruptura, que vale tanto como afirmar que este proceso se constituye en uno de los ejes de desarrollo de la etapa, y se manifiesta a través de un implacable cuestionamiento de la personalidad de ambos padres. En cierta medida conviene entender estas vicisitudes de la adolescencia como una defensa contra la dependencia: lo central del enfrentamiento no es agredir a los progenitores, sino lograr -sin el costo de la inseguridad- la convicción de que los mismos ya no son imprescindibles ni absolutos.
 
En muchos casos la rebeldía del adolescente constituye sólo una forma de dependencia por la negativa. Rechazar acríticamente todo lo que se nos propone es un signo de tanta dependencia como el hecho de aceptarlo todo irreflexivamente.
 
También nos ayudará a la comprensión de los enfrentamientos del joven con su familia durante esta etapa evolutiva, recordar que en ella, como en cualquier otra edad, se comprueba una estrecha correlación entre inseguridad y oposicionismo.
Por fin un observador atento y con un adecuado soporte teórico tendrá la impresión de que en muchas de aquellas manifestaciones de rebeldía se expresan necesidades del adolescente no visualizables en forma directa. Es imposible dejar de identificar tales necesidades con los cambios fundamentales que el joven está sufriendo y que hemos visto en apartados anteriores.
 
Ante todo la necesidad de rebelarse parece poder definirse como una necesidad de tener algo contra qué rebelarse. Con esta última forma de interpretar la motivación de la rebeldía, quedamos a un paso de la remanida necesidad de límites. Hemos visto cómo esta última depende del crecimiento rápido e incontrolable voluntariamente, y de la emergencia de novedosas pulsiones a las que el adolescente teme pues no sabe cómo administrarlas. Ante tal avalancha de hechos psíquicos inmanejables, el joven se defiende tratando de convencerse de su poder. Buen ejemplo de esas defensas es la curiosa costumbre de abrigarse en verano y andar desabrigado en invierno, como una manera de demostrarse a sí mismo la capacidad de controlar el cuerpo. En el campo de la Psicopatología pude observar un ejemplo muy significativo: un adolescente de catorce años me relató lo que para él era una experiencia habitual cuando viajaba en cualquier medio de locomoción público. En esas circunstancias ocupaba uno de los asientos posteriores, y desde allí se concentraba mentalmente para que algún pasajero, a quien miraba fijamente, se rascara determinada zona de la cabeza. Por cierto que los fracasos se multiplicaban hasta el cansancio, pero si en alguna ocasión coincidía su experimento con la conducta deseada en el vecino, la sensación de placer era de la misma intensidad de un orgasmo. ¿ Qué le sucedía a este joven en esos momentos excepcionales? Simplemente que se había demostrado a sí mismo que si era capaz de controlar un cuerpo ajeno a distancia, podía estar seguro de hacerlo con el propio.
 
No creo necesario detenerme a explicar por qué estos mecanismos de defensa -tanto normales como patológicos- no alcanzan a satisfacer la necesidad de límites creada por un crecimiento que continúa produciéndose con un ritmo incontrolable. Pero sí es oportuno recalcar que la insuficiencia de tales defensas vuelve imprescindible que el adolescente halle, por lo menos simbólicamente, la deseada contención: quiero decir que no le queda otro camino que buscar la puesta de límites por parte del medio, y especialmente de los padres. He aquí una de las razones de una rebeldía manifestada en sucesivas transgresiones en muchos momentos incomprensible para los demás.
 
La rebeldía, como comprobamos a medida que analizamos sus motivaciones, se va alejando cada vez más de la búsqueda de una autonomía real. Todavía queda una nueva razón para ello, y es el colorido que le brinda otra necesidad del adolescente. Como ya quedó dicho en un apartado anterior, el joven se ve impulsado a tomar distancia de objetos que la reactivación edípica ha vuelto incestuosos. De manera que va alejándose de la vida hogareña, refugiándose en su dormitorio para leer o escuchar música, en el baño, frente al televisor o la computadora, en otras casas -en las que termina admirando modalidades de vida que no siempre difieren de las de la propia tanto como él cree percibir-. En ocasiones el alejamiento es más radical y el refugio son clubes, plazas, locales de videojuegos, casas de comidas rápidas, y en un pasado muy reciente, estaciones de servicio con bar.
 
En general, y tal como lo describiera Anna Freud, la carga agresiva no tiene la misma intensidad hacia ambos progenitores. Parecería que frecuentemente el joven busca mantener un puerto de resguardo, conservando una mejor relación con unos de ellos. Se sostiene esta situación -con evidente e inconsciente complicidad parental - por medio de actuaciones transgresoras que fatalmente terminan produciendo un enfrentamieto entre el padre y la madre. Aquel que sufre más directa o más constantemente los embates de la rebeldía, o el que, por su personalidad se muestra más rígido ante tales transgresiones, termina viendo al otro como excesivamente permisivo y genera una hostilidad hacia el adolescente, que en parte se alimenta también de la envidia subyacente. Por otro lado dicha envidia en uno de los progenitores se viene a sumar a la que es consecuencia de comprobar que el hijo y el otro cónyuge constituyen una alianza de la que se siente excluido. El
aliado, con su ego satisfecho tanto por la predilección del joven como por el éxito de sus intervenciones, y relativamente condicionado por el rol de
proadolescente que le han atribuido, empieza a ver a su consorte como excesivamente severo e incomprensivo. En síntesis, se estructuran dos bandos que, en ciertos casos, resulta bastante difícil desarticular.
 
Si los fenómenos que venimos de describir no se extreman, ni se vuelven rígidos y reiterativos, y si la barrera intergeneracional queda más o menos intacta, es decir, si se siguen cumpliendo las pautas jerárquicas mínimas, el conflicto entre padres e hijos termina contribuyendo al crecimiento tanto de adolescente como del grupo familiar.

La pubertad en las chicas

Si eres adolescente, durante estos años cambiarás de tener cuerpo de niña a tener cuerpo de mujer. Cómo y cuándo tendrán lugar estos cambios físicos de la pubertad depende de cada niña. Es una época extraña y forma parte de los muchos cambios de la adolescencia. A continuación describimos los cambios más importantes que notarás durante estos años.

Cambios en la piel: En general la piel se hace más grasa, y es posible que sudes más que antes. Esto se debe a que están creciendo las glándulas. La higiene personal durante la adolescencia es muy importante para controlar malos olores corporales. Es muy probable que te salgan granos en la cara, sobre todo, y en la parter superior de la espalda. La presencia de este tipo de acné juvenil se deben a desequilibrios hormonales, y forma parte de la pubertad. Si te preocupa la intensidad de los granos, es aconsejable acudir a un médico para que te aconseje un tratamiento de limpieza adecuado a tu piel y un tratamiento contra los granos.

Apariencia de vello corporal: Durante la pubertad te saldrá vello en el pubis, en las piernas y en las axilas. La mayoría de chicas adolescentes deciden depilarse, con cera, crema, o máquina de afeitar. Nunca compartas la misma máquina de afeitar con nadie. De hecho, la mejor forma de depilarse es con cera, porque los pelos tardan más en volver a salir.

Cambios en la forma de tu cuerpo: Durante la pubertad las caderas se anchan y la cintura se acentúa. Grasa empieza a acumularse en el estomago, las piernas y las nalgas. Esto es completamente normal y hace que tengas las curvas de una mujer.

El pecho: Para la mayoría de chicas, la pubertad empieza cuando los pechos empiezan a crecer. Primero notarás un bulto a veces algo doloroso por debajo del pezón que poco a poco empieza a crecer. Al principio es normal que un pecho crezca a un paso distinto al otro, por lo que no debes preocuparte si uno es más grande que el otro. Cuando han crecido a su tamaño final, lo más probable es que sean más o menos iguales. Durante el crecimiento empezarás a llevar sujetador. No te preocupes si tus pechos crece más lento que los de tus amigas. Cada niña tiene una pubertad distinta

Cambios de tamaño en distintas partes del cuerpo: Durante la fase de la pubertad, todas partes de tu cuerpo crecen, pero es posible que algunas más rápidos que otras. Tal vez esto te hace sentir rara y algo torpe. No te preocupes - es normal.


La menstruación: Supone el momento que señala el inicio de la madurez sexual cuando los ovarios empiezan a producir huevos, o óvulos. La menstruación suele empezar entre las 9 - 16 años de edad. A partir de la primera regla, una niña puede quedarse embarazada.
Antes del primer periodo, la mayoría de niñas empiezan a tener mayor cantidad de flujo vaginal transparente.
¿Qué es la menstruación? Durante la pubertad, los ovarios empiezan a producir huevos. Si un huevo resulta ser fertilizado por los espermatozoides de un hombre, crecerá dentro de tu útero y se convirtirá en un bebé. Para prepararse, una capa de tejidos y células de sangre se forman en tu utero cada vez que un huevo sale del ovario. Si el huevo no resulta ser fertilizado, estos tejidos y células ya no son necesarios, por lo que se convierten en un flujo de sangre y salen del cuerpo por la vía vaginal.
Tendrás que utilizar compresas o tampones (si decides utilizar tampones, aprende a insertarlos bien con la ayuda de tu madre, y a cambiarlos de forma muy frecuente para evitar infecciones) y a extremar la higiene. Tal vez tengas molestias: dolor, cambios de humor, depresión, incremento de peso o incluso nauseas durante los días antes de la regla. Si es así, habla con tu madre. Normalmente la regla dura entre 3 - 7 días, aunque puede haber variaciones, cada 3-6 semanas, aunque a veces no existe ninguna regularidad durante los primeros años.

La pubertad en los chicos

Los chicos suelen pasar la pubertad entre los 10 y 16 años. Casi siempre va acompañada por un crecimiento muy notable durante uno o dos años, en los que es posible que cambie de talla de zapato y pantalon ¡más de 3 veces en un año!

Vello: Durante los años de la pubertad crecerá vello en las axilas, piernas, cara, arriba del pene e incluso en el trasero. Es posible también durante la última fase de pubertad que aparezcan pelos en el pecho, aunque no todos los hombres tienen vello en esta zona. En la cara, aparecen primero pelos finos en la zona del bigote haciendo una sombra. Cuando decida empezar a afeitarte, es importante que tengas una maquinilla propia y que no compartas con familiares o amigos. Utiliza siempre crema de afeitar, porque de lo contrario podrías irritar la piel.

La piel: tendrás la piel más grasa y sudarás más que antes. Debes lavarte todos los días y utilizar un desoderante o antperspirante durante el día para controlar olores. Durante la pubertad es probable que te salgan granos en la cara y/o espalad. La mayoría de adolescentes padecen acné en algún momento de la pubertad. Si te preocupa, debes consultar un médico que te podrá aconsejar sobre los mejores productos (jabón y cremas) según el tipo de piel que tengas.

Voz: La mayoría de chicos empiezan a notar cambios en la voz alrededor de los 14 años. Durante unos mesos - o años - tendrás un tono extraño hasta que se termine de cambiar y tendrás ya voz de hombre.
La forma de tu cuerpo: Durante los años de la pubertad, crecerás más alto y tus hombros se ancharán. Ganarás peso. Algunos niños experimentan un hinchazon debajo del pezón. Esto es muy frecuente y no debe preocuparte. No quiere decir que tus pechos vayan a crecer y poco a poco irá desapareciendo el hinchazón. Durante la pubertad tus músculos crecerán y se endurecerán. Algunos niños aprovechan esta epoca para empezar a entrenar con pesos, pero algunos lo hacen antes de que su cuerpo esté preparado, lo que es un error porque puedes exponer los músculos a una sobrecarga innecesaria. Si quieres entrenar en un gimnasio, debes contar con la ayuda de un entrenador profesional que te aconseje cómo entrenar.

Tamaño del cuerpo: Es una época de fuerte crecimiento, y a veces te sentirás torpe y tendrás la sensación que tus brazos sean demasiado largos, tus manos y pies muy grandes.... Descuida porque al final de la pubertad todo llegará a ser más uniforme.

Las drogas

Uno de los retos que más nos inquietan a los padres de hijos adolescentes es ayudar a nuestros hijos a rechazar el mundo de las drogas. Pero ¿cómo podemos lograr que un hijo diga no a la droga?
A pesar de los programas anti-droga llevados a cabo durante los últimos años por las autoridades en las escuelas y los institutos, y los programas educativos dirigidos a los padres de adolescentes, el índice de consumo de todo tipo de droga, desde tobaco, marihuana, alochol, pastillas y cocaína.... entre los jóvenes sigue en aumento.
A diferencia de generaciones anteriores, el consumo de la mayoría de estas drogas ya existían cuando los que son ahora padres de adolescentes eran más jóvenes. Pero no había una proliferación tan extendida como la de hoy, y el contacto con la droga normalmente se realizaba más mayores cuando uno tiene más capacidad de decisión, más facilidad para rechazar ciertos hábitos y más madurez para comprender el daño que puede ocasionar el consumo de drogas. Hoy en día nuestros hijos adolescentes están expuestos a estas sustancias en una edad en la que sienten todavía la presión de hacer lo mismo que sus compañeros y en la época de la infancia cuando más tienden a rechazar los consejos de personas adultas.
Nadie tiene una respuesta fácil para uno de los problemas más preocupantes de la sociedad moderna. Pero aquí ofrecemos algunos consejos que pretendemos ayuden a aquellos padres que desean encontrar formas de mantener a sus hijos adolescentes alejados del mundo de la droga o bien ayudarle si cree que ya ha empezado a tomar sustancias dañinas. 






El alcohol

Normalmente, nosotros, los jóvenes, cuando hacemos esa pregunta un viernes o un sábado, incluso un jueves, el 50% de la respuesta, al menos en la mayoría de los jóvenes está ya contestada, (no hay que generalizar, que hay hijos ejemplares por ahí sueltos y se merecen nuestro aplauso).
- Ir a tomar unas copas si la economía nos lo permite es, sin duda uno de los mejores planes.
- Si andamos escasos de dinero, un botellón es la segunda opción.
El otro 50% de la pregunta, se refiere al sitio, discoteca, pub o cualquier espacio allá donde podamos reunirnos con los nuestros, charlar, beber, reirnos, beber, divertirnos, beber, conocernos, beber, reirnos más, beber más, hablar menos, beber más, bailar más, beber más...
Pero si te paras a pensarlo, aunque sólo sea pensarlo, esto de beber para reirnos, conocernos, ligar...todo esto es el principio de una cadena. El final lo veremos más tarde.

Estamos hartos de oír a nuestros padres decirnos, no bebas, no fumes, no te juntes con esa gente, no te vistas asi.....al menos algunos padres.
Otros por el contrario, son el extremo opuesto, que tampoco es lo conveniente.
Lo ideal, el término medio.

Pero....entonces, el término medio para todo. Tampoco es conveniente salir de marcha y por sistema emborracharse al máximo, no hace falta, de verdad!
Yo creo que debemos encontrar un equilibrio.
La vida, cuanto más equilibrada mejor, que ya bastante dura y difícil es, como para encima ir lanzándonos piedras a nuestro tejado.
Volviendo a la cadena, al final de la cadena, todos lo sabemos, pero también todos la ignoramos.
Parece ser que siempre tendemos a irnos por el lado oscuro, es decir, siempre tenemos dos opciones, hacerlo bien o hacerlo mal.

Evidentemente, esto no es tan fácil y tampoco se puede hablar en términos absolutos, a veces, el hacerlo bien nos parece más difícil porque tenemos que dar la cara, o nos parece más aburrido porque no corremos ningún riesgo, tenemos que pensar más, etc...
El hacerlo mal puede parecernos la manera más rápida, o asegurarte algo cueste lo que cueste.

Con lo "fácil" que es pensar en las consecuencias y entonces decidir el camino.
Pero es que pensar en las consecuencias de algo que queremos o de algo en lo que creemos....eso si que es difícil.

Para que no tengamos que pensar nada, yo propongo una lista con 10 puntos negativos sobre el alcohol, es decir, 10 principales consecuencias del clásico ron-cola, beefeater-limón, whisky con....con lo que sea:

Problemas sexuales: tanto para los chicos como para las chicas. En los chicos, problemas de erección...ejem ejem, y en las chicas problemas en la menstruación.
Engorda: no es algo nuevo, pero si, el alcohol engorda, y mucho mucho más de lo que pensamos, además estropea la piel.
Enfermedades: hablo de enfermedades como la cirrosis o serios problemas de riñón, hipertensión y un largo etc que nos sorprenderíamos todos. Desde luego, no por tomarnos un par de copas a la semana tenemos todas las papeletas, pero claramente, los que empiezan a beber con 12, 13 o 14 años están tentando a su futura suerte, porque este primer punto es a largo plazo.
Cáncer: de boca, de esófago, de pulmón, de colon...en fin...parece que está de moda, y no nos damos cuenta que puede ser por nuestra culpa y por el dichoso camino oscuro, ese camino del que hablaba antes.
Problemas de personalidad: de repente estás muy contento, eufórico y con un simple "click" nuestro estado de ánimo puede llegar a cambiar hasta puntos insospechables, hasta no llegar a conocernos ni nosotros mismos, volvernos violentos, decir cosas de las que luego nos podamos arrepentir, meter en problemas a gente que queremos, llorar y otro largo etc...
Pérdida de memoria: intenta acordarte de lo que cenaste antes de ayer... Pues con el alcohol esa sensación se acentúa y se agudiza sin control. Tiene que recordarte que te tirabas por el suelo, que vomitaste delante de la o del chic@ con el que un rato antes, en la primera parte de la cadena, hablabas y reías sin problemas.
Dependencia: como todo lo adictivo, el alcohol crea dependencia y además de todos estos problemas, súmale el dinero que se te va.
Riesgos de accidentes de tráfico: que por culpa de uno que va bebido acabes tu en el cementerio no es justo, que por culpa de uno que va bebido acabéis tu, tus amigos y el coche contra el que se impacta en el cementerio me parece menos justo todavía.
Coma etílico: por hacer el tonto, simplemente por eso, porque en todo momento cualquier persona con dos dedos de frente puede saber cual es su límite, saber hasta que punto puede llegar...Que por hacer el tonto acabes en el hospital con una aguja entre pecho y espalda o sino en el otro barrio...sin excusas.
Resaca: pongo esta consecuencia la última, porque es la última que se sufre, en caso de no haber perdido la vida antes, claro; duro pero cierto. Dolor de cabeza, sed, malestar, acidez....                                                                                            







       

Embarazos no deseados

EL EMBARAZO NO DESEADO Y SU PREVENCIÓN
La sexualidad y la reproducción son dos cosas distintas. Durante toda la vida tenemos sexualidad, pero solo somos fértiles (podemos tener hijos) durante un período de tiempo aproximadamente en la mujer desde los 11 hasta los 50 años.
Los métodos preventivos permiten decidir cuantos hijos y en que momento se quieren tener. A pesar de ello, y por falta de información, existen todavía muchos hijos/as no deseados. Para que sepas como controlar tu capacidad reproductiva y puedas disfrutar de tu sexualidad, el CJAS pone a tu disposición esta información.
El embarazo puede ser el episodio más feliz o desdichado, dependiendo del contexto psicosocial en que se produzca. Si se produce en el seno de una pareja que lo desea y se encuentra para llevarlo a buen termino, será una buen experiencia. Si se trata de un embarazo no deseado en una adolescente, se puede convertir en una tragedia, tanto para ella, el futuro bebe, los padres, los familiares, los amigos, los servicios sanitarios y educativos.
Las jóvenes, corren el doble riesgo de experimentar anemia, preclamsia y complicaciones en el parto, así como un mayor riesgo de mortalidad propia durante el mismo. Por otra parte, la relación coital y el embarazo precoz se suelen asociar con el cáncer cervical y las complicaciones uterinas.
Desde un punto de vista psicosocial, las investigaciones realizadas demuestran que los hijos de mujeres adolescentes experimentan muchos más problemas de conducta y problemas en la escuela, que la de los partos en no adolescentes. Las tasas de separaciones y divorcios son mucho mayores entre las parejas formadas de manera forzada por un embarazo no deseado. La paternidad temprana es un escenario abonado para el abuso y el abandono infantil.
Desde el punto de vista educativo, en España el sistema de enseñanza no tiene prevista esta circunstancia. En algunos países tienden a negarles la entrada al colegio por temor a que puedan influir desfavorablemente en otros alumnas. Las madres adolescentes terminan, por lo general, convirtiéndose en personas aisladas socialmente.
Recuerda que:
•El embarazo puede producirse cualquier día del ciclo menstrual de la mujer.
•No es necesario que se produzca una eyaculación dentro de la vagina para que se produzca un embarazo. Mucho antes de eyacular, el varón segrega el líquido pre-eyaculatorio, que puede contener espermatozoides suficientes para producir un embarazo ("Antes de llover chispea").
Si has decidido tener relaciones con penetración y también deseas evitar el embarazo, asesorate sobre los métodos preventivos. Seguro que encontrarás uno que es el ideal para ti y tu situación. Si tu elección es el preservativo, puedes consultar nuestra página sobre el uso correcto del preservativo.

Bulimia

La bulimia nerviosa se caracteriza por episodios recurrentes de voracidad o atracones donde la persona come en poco tiempo una gran cantidad de comida muy superior a la que la mayoría de personas comerían.
Estos episodios son seguidos por conductas compensatorias inapropiadas como son el vómito provocado, el abuso de fármacos laxantes y diuréticos u otros medicamentos, el ayuno o el ejercicio físico excesivo, para evitar engordar ya que tiene un miedo horrible a ganar peso porque su autoevaluación se encuentra excesivamente influida por la silueta y el peso corporal.

Efectos físicos y psicológicos de la bulima en los adolescentes
En la bulimia las complicaciones físicas suelen ser el resultado de la conducta alimentaria y de las purgas dándose con frecuencia las irregularidades menstruales y amenorrea.
La complicación cardiovascular más importante es la pérdida de potasio a través de los vómitos o por el abuso de laxantes provocando importantes alteraciones en el electrocardiograma con nefastas consecuencias.
Al producirse el vómito, el ácido que le acompaña actúa sobre el esmalte dental pudiendo resquebrajarse o parecer carcomidos; también aparece una dilatación gástrica con el riesgo de rotura de estómago por las abundantes comidas o por el gran esfuerzo que se produce al vomitar; u otras complicaciones como esofagitis, úlceras, hemorragias e incluso perforación del esófago que en alguna ocasión puede llegar a causar la muerte. El uso habitual de laxantes puede producir alternancia de diarreas y estreñimiento y una dependencia a este tipo de fármacos que hace mucho más difícil el abandonarlo.
Como resultado de las purgas, los desequilibrios electrolíticos pueden a veces llegar a causar problemas médicos graves.
En la bulimia la persona desarrolla una imagen corporal negativa y errónea. Nunca aprueba su cuerpo, tiene una preocupación excesiva y desproporcionada por su figura. En general siempre está muy insatisfecha consigo misma con un gran sentimiento de culpa por todo lo que hace y con una autoestima muy baja.
- Los pensamientos son negativos, exagerados, en términos absolutos, generalizaciones excesivas, siguiendo la idea de todo o nada sin permitirse términos intermedios.
- Puede aparecer alteración de la impulsividad, gran inestabilidad emocional, dependiendo mucho de la opinión de los demás, llegando a tener en algunas ocasiones ideas de agredirse a sí mismas o de suicidio cuando el trastorno se agrava.
- Desarrollan ideas obsesivas relacionadas con la comida fundamentalmente y ello les provoca muchos momentos de gran ansiedad.

La personalidad del adolescente con bulimia nerviosa
En la anorexia puede aparecer un Trastorno de personalidad obsesivo-compulsivo o Trastorno por evitación.
La persona con bulimia se caracteriza por su mayor sociabilidad y tendencia a actuar de forma impulsiva y descontrolada. Correspondiéndose con estos rasgos aparece con mayor frecuencia un Trastorno de personalidad límite o Trastorno de personalidad histriónico.


 

PROBLEMAS DE LA ADOLESCENCIA (Anorexia)

La anorexia nerviosa se caracteriza en los adolescentes por el rechazo a mantener el peso del cuerpo en los valores mínimos normales.
Para ello el adolescente realiza dietas muy restringidas, limitadas a unos pocos alimentos con la finalidad de perder peso, debido a un miedo intenso a ganar peso y a una alteración en la percepción de la forma y tamaño de su cuerpo, de su imagen corporal.
Consecuencias de la anorexia en la salud del adolescente.

En la anorexia la mayoría de los problemas físicos que aparecen son consecuencia de la mala nutrición, de la restricción alimentaria y de la pérdida progresiva de peso, del uso abusivo de laxantes, diuréticos y el vómito. En las jóvenes adolescentes, desaparece la menstruación. Aparece estreñimiento, sensación de plenitud y de hinchazón. Complicaciones renales y cardiovasculares siendo las más frecuentes la bradicardia y la hipotensión, hidroelectróliticas y arritmias.
En algunos casos de anorexia en adolescentes hay riesgo de muerte súbita.
Puede aparecer un aumento del vello, llamado lanugo, en brazos, piernas, hombros, espalda y cara. La piel del cuerpo se reseca y agrieta, se puede llegar a alcanzar una coloración amarillenta de piel en las de extremidades.
El cabello se seca, pierde brillo y cae abundantemente. Las uñas se vuelven quebradizas. Los huesos también se resienten, y puede producirse un estancamiento en el crecimiento y no llegar a alcanzar la talla previsible.
Las consecuencias psicológicas y del comportamiento de la anorexia
La persona que sufre anorexia presenta una gran insatisfacción y un nivel de autoestima muy bajo debido a las actitudes y pensamientos negativos que tiene hacia su cuerpo y hacia sí misma. La distorsión del pensamiento suele presentarse en forma de tremendas exageraciones, generalizaciones, en el sentido de todo o nada.
El carácter también cambia y se va mostrando más susceptible, más irritable y ansioso, con cambios bruscos en su estado de ánimo, perdiendo el interés por lo que le rodea.
Aparecen trastornos como la depresión, la ansiedad, la fobia, o pensamientos obsesivos, rituales y compulsiones.
En cuanto a su comportamiento, su forma de comer se lentifica, esparce la comida en el plato, la manosea, se pesa con frecuencia, palpa de forma repetida partes de su cuerpo, recoge información de recetas y calorías.



la tercera etapa de la adolescencia desde los 15-18

Cambios fisicos : Mayor homogenidad entre sus compañeros porque la mayoría ya ha pasado por la pubertad y durante esta etapa llegan a su altura y peso de adulto.

Fase cognitiva: Mayor capacidad para pensar de forma abstracta e hipotetica sobre el presente y el futuro. Al poder entender y compartir mejor los acontecimientos que les rodean y que ocurren más allá de su circulo social inmediato, pueden adoptar una nueva conciencia social.

Desarrollo moral : Menos egocentrismo y mayor énfasis sobre valores abstractos y principios morales. Como el desarrollo emocional y el desarrollo cognitivo no van al mismo paso, es posible que los mismos adolescentes que reivendican ciertos valores, los violan a la vez. En este sentido es una etapa algo contradictoria.

Concepto de si mismo : Es la etapa en la que los adolescentes forman su propia identidad. Experimentan con distintos aspectos, papeles, valores, amigos, aficiones.... Niñas con problemas de peso pueden tener tendencia a la depresión.

Características psicológica :Cierta vulnerabilidad ante posibles preocupaciones, depresiones y trastornos como la anorexia.

 Relaciones con los padres :Conforme se van avanzando por esta última etapa de la adolescencia, suele haber menos conflictos entre hijos y padres y mayor respeto porque los hijos ya pueden ver sus padres como individuos y comprender que sus opinions se basan en ciertos valores y esto produce una mejoría en las relaciones familiares. Siguen discrepando con algunos límites impuestos por los padres (como dinero, tareas en casa, hora de llegar a casa, apariencia...), aunque la existencia de estos limites les beneficiarán mucho a largo plazo.
Relaciones con los compañeros :
Las amistades entre chicos y chicas empiezan a ser más frecuentes y la influencia de los amigos sigue siendo clave en el desarrollo personal de una identidad propia. Los amigos anti-sociales pueden aumentar un comportamiento antisocial en el adolescente.

lunes, 8 de noviembre de 2010

..¨Encuesta ¨..

Hola  hemos puesto en nuestro blogg una encuesta votar y el día 9 de febrero cerraremos las votaciones para saber los resultados . 
Gracias. :)

martes, 2 de noviembre de 2010

2º etapa de la adolescencia

2. Adolescencia desde los 11 hasta los 15 años

Cambios físicos=  Llegada de la pubertad con velocidad distinta dependiendo de cada adolescente. Aumento de apetito en épocas de crecimiento. Necesitan dormir más. Desarrollo de los organos sexuales, cambios en la voz, posible olor corporal






Fase cognitiva=  Desarrollo de nuevas capacidades para ver las cosas en términos relativos y abstractos y para pensar. Sentido de humor puede estar más centrado en la ironía y el sexo. Epoca de mayor conflicto con padres.





Desarrollo moral= Tendencia hacia el egocentrismo. Buscan la aprobación social de sus compañeros. Aunque entienden los conceptos relacionados con el orden social, a esta edad suelen cuestionar ciertos principios sociales, morales y/o éticos, a veces sobre todo los que tienen los padres.



 Concepto de si mismo= Depende de cómo aceptan los cambios que ocurren durante la pubertad. Tendencia a conformarse con estereotipos de hombre o mujer. Preocupación con problemas de peso, piel, altura y el aspecto físico en general.




Relación con los padres= Suele ser la etapa de mayor conflicto con los padres mientras buscan una identidad propia dentro de la familia más allá que la del niño o la niña de antes. Busca más compañía de sus compañeros. Rechaza a veces muestras de cariño, aunque las sigue necesitando. Deseo de tomar sus propias decisiones y rebelar contra las limitaciones de la disciplina de padres aunque la siguen necesitando.




Relacion con los compañeros=Los cambios de la pubertad y cómo reaccionan los compañeros pueden condicionar las amistades. Mayor tendencia a compartir confidencialidades y formar grupos de 2 a 6 amigos. Se despierta el deseo sexual y algunos empiezan ya a formar parejas.


sábado, 30 de octubre de 2010

etapas de la adolescencia 1º etapa

      1.      La pre-adolescencia: desde los 8 años asta los 11
  • Cambios fisicos = Crecimiento desigual de huesos, músculos y organos puede dar una apariencia algo torpe. Supone el inicio de la pubertad para la mayoriaUno de los principales cambios que se viven en la adolescencia tiene que ver con la aceptación y adaptación al nuevo cuerpo, ese cuerpo que es muy diferente al que tenías de niño o niña.Esta situación provoca una especie de aislamiento (un ejemplo de esto es que se prefiere pasar mucho tiempo a solas encerrado/a en el cuarto) y a la vez a una exploración constante del cuerpo. También surgen sensaciones de vergüenza e incomodidad, especialmente por la creencia de que las demás personas están muy pendientes de los cambios que ha experimentado nuestro cuerpo. Esto también genera que se le dedique mucho tiempo y atención a la apariencia física, probando nuevas formas de: vestir, peinarse, hablar, caminar, con la intención de mostrarse más atractivo y ser aceptado por los demás



  • Fase cognitiva =     Pensamientos lógicos y tendencia a despreciar pensamientos imaginativos de la infancia. Capacidad para acumular grandes conocimientos y aplicar nuevos conceptos. Mayor interés para aprender habilidades de vida (cocinar, reparar).etc Según Piaget, los adolescentes logran el más alto nivel de desarrollo cognitivo (operaciones formales), cuando alcanzan la capacidad para pensar en forma abstracta. Este desarrollo se inicia a los 11 años, este pensamiento le proporciona nuevas herramientas para manejar la información. Ya no sé limitan al aquí y al ahora, sino que pueden planear el futuro. Son capaces de elaborar y comprobar hipótesis. Capaz de preguntar el porque de las cosas


        

·  desarrollo moral = Egocéntrico en general, aunque ya tiene conciencia. Comprende los conceptos lo que es justo y la negociación. No siempre se ve reflejada su capacidad moral en su comportamie.hay una serie de personas que han sido capaces de esplicar que es lo que ocurre en esta fase del adolescente como por ejemplo:Kohlberg definió el razonamiento moral como los juicios sobre aceptación o desviación a la norma. Sus estudios de razonamiento moral están basados en el uso de dilemas morales o situaciones hipotéticas en las que una persona debe tomar una decisión. Kohlberg definió el nivel de razonamiento moral a partir de la solución de los dilemas. Notó que el desarrollo moral estaba relacionado a la edad y estableció tres niveles con 2 etapas cada uno. De estas seis etapas, muchas personas progresan sólo hasta la cuarta o la quinta. También hay que decir que son universales, es decir, son válidas para cualquier era y cultura, además de irreductibles. Por otro lado, van apareciendo según el niño interactúa con el entorno social

   
  • Concepto de si mismo= En gran medida influido por las relaciones con los miembros de su familia, profesores y cada vez más, por sus compañeros. Muchos niños tienden a imitar el estereotipo masculino. El auto-imagen de muchas niñas puede sufrir con la llegada de la puberta. tambien otro forma de explicar el concepto de si mismo es:Los adolescentes suelen sentirse inadecuados. Tienen nuevos cuerpos y mentes en desarrollo y relaciones con amigos y familiares que van cambiando. Entienden por primera vez que no siempre hacen todo bien. Los cambios en sus vidas a veces llegan más rápido que la capacidad para adaptarse a ellos.La falta de autoestima generalmente se agudiza durante los primeros años de la adolescencia, luego mejora un poco durante los siguientes años a medida que las nuevas identidades se fortalecen y enfocan. A cualquier edad la falta de confianza en sí mismo puede ser un problema serio. Los adolescentes que carecen de autoestima pueden ser solitarios, torpes en su trato con otras personas y muy sensibles a las críticas sobre lo que ellos piensan son sus insuficiencias. Los jovencitos con poca confianza en sí mismos son menos aptos a participar en actividades con sus compañeros y a formar amistades con ellos. Esto los aísla todavía más e impide que desarrollen una mejor imagen de sí mismos. Y cuando entablan amistades, son más vulnerables a la presión negativa de los amigos


  • Cracteristicas Psicologicas= -características psicológicas y emocionales de las adolescentes:
  • Las chicas jóvenes experimentan sentimientos de soledad, de poca confianza en sí mismas que intentan suplir con las relaciones íntimas con el otro sexo.
  • Existe una escasa o nula comunicación con sus padres o con las hermanas mayores, sobre todo, en lo que concierne al sexo. Esto les lleva a buscar y encontrar la opinión y el consejo de otros jóvenes de su edad con su misma inexperiencia y falta de correctos patrones de conducta.
  • Existe además un desmedido afán por entrar en contacto con "nuevas experiencias".
  • Además parece ser que las jóvenes incluidas en programas de educación especial tienen también más riesgo de tener un embarazo en su adolescencia.
  • Todas las estadísticas realizadas demuestran que hay mayor número de embarazos en adolescentes cuyas familias están separadas y también en familias con un solo progenitor.
  • Entre las madres adolescentes existe un factor común a todas ellas: una mala historia de rendimiento escolar. Existe un alto índice de abandono precoz de los estudios, sobre todo entre las madres más jóvenes.
  • Hasta un 60% de las jóvenes madres pertenecen a familias cuyos padres están separados; y un 40% no ha vivido nunca una situación familiar estable.



  • Relaciones con los padres= Suele ser la etapa de mayor conflicto con los padres mientras buscan una identidad propia dentro de la familia más allá que la del niño o la niña de antes. Busca más compañía de sus compañeros. Rechaza a veces muestras de cariño, aunque las sigue necesitando. Deseo de tomar sus propias decisiones y rebelar contra las limitaciones de la disciplina de padres aunque la siguen necesitando. Ahora os voy a poner un libro que habla sobre los comportamientos que los adolescentes odimos que hagan nuestros padres .
Tratar de conocer la relación de los jóvenes con sus padres, también fue uno de los objetivos de la encuesta, especialmente hechos y situaciones provenientes de sus padres que a los chicos les molestan.
Existe al respecto el antecedente de un libro escrito por dos jóvenes norteamericanos de 16 años, Zack Elias y Travis Goldman, quienes bajo el título de "Cómo no avergonzar a sus hijos" relataron 250 situaciones, por momentos muy graciosas que según los autores no deben hacer los padres de adolescentes. Basado en lo anterior se les pidió a los chicos que respondan si había cosas que hacían sus padres que les molestara y de ser así, que las describan. Un 20 % respondió que "nada de lo que hacen sus padres les molesta", un 32 % no respondió, y el 48 % restante relató 121 situaciones de hechos y actitudes de sus padres que a ellos disgustaban



  • relaciones con los compañeros=
      Cuando el niño entra al colegio, la familia constituye el grupo más importante y
      casi único de referencia. El niño trata y conoce a nuevos compañeros y a
      nuevos adultos y suponen un segundo grupo social a parte del formado por la
      familia. Sin embargo en la adolescencia, aumentan considerablemente los
      espacios donde son posibles los intercambios o interacciones sociales y, por
      otro lado, se debilita enormemente la referencia a la familia. La emancipación
      respecto a ésta, en el curso del proceso de adquisición de autonomía personal
      y como elemento constituyente de este proceso, es, sin duda, el rasgo más
     destacado de la nueva situación social del adolescente.